Quiero piel
es mi grito enfebrecido
de amazona
Cabalgarte en diáspora
de manos
y peces
Hay un mar que ruge
entre las piernas de una mujer
y un hombre
temeroso de esa violencia
la exorciza
inmolándola
en la pira del cuerpo
Pero el corazón
es un pájaro
inmune a las jaulas
Si le quemas las alas
ramas brotarán
que alzándose hasta los cielos
exprimirán las nubes
y lloverán amores
encharcando las calles
En sus aguas boquearán besos frescos
pezones florecidos,
y sexos en sed de otros sexos
Llegará el apocalipsis
entre meandros
y remolinos
de carne
Ese pájaro tiene el control del mundo.
ResponderEliminarUn beso.
Una loba enloquecida por el hambre, un viento impiadoso, una ménade alucinada que no repara en consecuencias...agjhhhhhhhhhh
ResponderEliminarPara bien o para mal(en mi caso pienso que para bien)sí. Besos querida!!
ResponderEliminarQué seres terribles las ménades, sin embargo a mí es una figura que no deja de hipnotizarme. Ya me dirás qué significa ese agjhhhhhhh..
ResponderEliminarMadre! Cuanta pasion en este poema, me encanta!
ResponderEliminarBesos y se feliz!